MAL EMPEZAMOS

¿Será casualidad? No lo creo. Más bien causalidad. No puede, ni debiera, ser de otra manera. Algo que proviene del propio infierno no podía elegir otro día para aparecer que un viernes trece. Clara manifestación de intenciones. Del infierno salimos, y alli terminaremos, como corresponden a los malos malísimos.Yo, de momento, he intentado guardar más las apariencias y aparecerme y llegar al infierno el mismo día 14 de abril. Tampoco es casualidad. Pero, ¿que mejor día para llegar a donde ya nos han mandado en infinidad de ocasiones? Y las que nos quedan, que no seran pocas. De momento, me permito la segunda maldad -la primera ha sido abrir esta puerta a las tinieblas- y gritar junto a otros camaradas: VIVA LA REPUBLICA.