jueves, 7 de junio de 2007

El pacto de la llana

Un día quise votar, y ser libre, pero me di cuenta de que habíamos perdido. Entonces, fue cuando supe que era libre en cierto modo, porque lo que yo había votado tenía pensamiento de unirse a otro que yo no había votado y hacer así un hijo pródigo de algo que yo no había votado pero que se acercaba bastante a lo que yo había votado. Una coalición, vamos.
Y el tercero en discordia, el pepero, decía que le dejasen gobernar, que la llana había pedido el cambio, como lo del café y la media de mantequilla. Pero los dos malutos rojillos no querían. Decían que se pueden hacer pactos (pacto aquí, pacto allá) y entonces se pusieron a negociar el pacto: la alcaldía para mí, sanidad para ti, cultura para mí (¿cultura?¿qué es eso?, preguntó uno de ellos. Nada, respondió el otro, algo para que en cuatro años consigamos eso de la llana 2016, pero sin buya, total, han firmado un montón de artistas... ¡Y hasta la ministra de cultura! ¿Cultura?¿Hay un ministerio de cultura? Claro, dijo, no podía ser de otro modo; en España otra cosa no, pero de cultura y follones entendemos un montón). Total, que se escuchó entonces en la llana: ¡Aquí de pactos nada, cojones! Y todo se miraron contrariados porque vieron que era uno del Pp que era el número dos de la lista. Rieron los rojillos y lloraron los azulillos.
Entonces el pacto no quedaba claro, aunque los mentideros políticos de la ciudad decía que sí, sí, por cojones hay pacto, y no se respetaba la voluntad de la mayoría, que se representaba en catorce escaños llenitos de gaviotas.
Moraleja: no me gustan los pactos, no, no, no... Hay que respetar la voz de la mayoría, que conste, yo voté por lo contrarios. Pero en Córdoba parece que pasamos del tema, que nos da lo mismo los que Gobiernen con tal de que no metan demasiado la mano y no dejen que Sandokán (es un nombre en clave...) haga lo que le sale de los (minutos musicales) en la sierra. Total, un lío. Que gobierne el que ha ganado y fuera.
¡VIVA LA DEMOCRACIA, (minutos musicales)!

Revertiano, a ver si pones Autopista al infierno (déjame hablar, cojones ya) de los AC/DC, por favor.

2 comentarios:

Alberto dijo...

Yo te dejo hablar de lo que tú quieras, querido. Y lo de Autopista al Infierno qué es exactamente, de quién. Si me lo dices lo busco y es la próxima. Jeje.

Éboli dijo...

Totalmente de acuerdo contigo Berma. Es que no sé a que leches nos llaman a votar si luego hacen lo que le sale de sus excmos. lugares.